Leer un cuadro: El columpio de J.H. Fragonard

Cuando Fragonard, entonces un niño de seis años, llega a París, la Ciudad de la luz se está convirtiendo en el centro del universo social y artístico del mundo, en detrimento de Roma, que lo ha ostentado en el siglo anterior. Nuestro pintor estudiará allí con dos grandes maestros: Boucher y Chardin, y alcanzará su madurez en un periodo artístico, el Rococó, conocido por su caracter lúdico, brillante, frívolo y sensual en contraposición al Barroco. Es un arte mundano, sin influencias religiosas y muy relacionado con la decoración de muebles, tejidos, adornos. Desde el punto de vista artístico supone asumir el concepto enunciado por el filósofo alemán Alexander Baumarten de "el arte por el arte", sin ningún pronunciamiento moral. No hay más objetivo que el de la estimulación de los sentidos. No solo en el arte sino también en la literatura se relaciona este estilo con lo libertino y con el hedonismo que tiene su pistoletazo de salida en la novela de Choderlos de Lanclos ...